sábado, 19 de julio de 2008

Si quieres ser popular

...tendrás que aprender a no decir no, a complacer a la mayoría, a ser menos tu mismo y a seguir la corriente,...
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"¡Y la verdad os hará libres!". Cierto, serías libre. Pero si dices la verdad mucha gente te va a odiar porque te verán como una amenaza a sus planes y pretensiones. Te convertirás en su conciencia, en su super-yo. Y los humanos odian eso.

"Esclavo de tus palabras y amo de tu silencio". Falso. Sólo el silencio esclaviza. La palabra y la verdad liberan. Pero te abandonarían y rechazarían como perro con peste, porque la gente no tolera a los que hablan, a los que reclaman sus derechos o denuncian malas acciones. La frase inicial fue escrita por un mudo o dicha por algún beneficiario de tu silencio.

Si quieres ser popular tendrás que aprender a no decir no, a complacer a la mayoría, a ser menos tu mismo y a seguir la corriente, llena de oportunidades. Renunciarás a tus principios, si los has tenido, a tu integridad y rectitud, porque éstos no son compatibles con la popularidad, pero si con la soledad.

También necesitarás demostrar algún poder social, económico o político, porque la humanidad adora el poder en todas sus formas, ya sea en riqueza personal, influencia social y política, o mejor, todos estos modos juntos. De esta forma te amarán y adularán siempre.

Deberás ser concertador, tolerante y solidario con todos, sin importar que estés rodeado de corruptos, hipócritas y sinvergüenzas. Después de todo, éstos serán los ejecutivos, presidentes y directores de algunas de las instituciones a las que obligadamente tendrás que pertenecer. Y de ellos dependerás para tu progreso social, profesional, económico y político.

Para ser popular, la participación social, con los mismos dirigentes de arriba, es indispensable. Hazte miembro de todos los clubes y asociaciones. Ni se te ocurra discrepar, protestar o denunciar acciones que consideres indebidas, pues tus días estarían contados. Nunca solicites los estatutos ni las normas internas de la institución a la que perteneces. En cualquier caso, tus posibilidades de ascender y ser elegido serán nulas. Y para siempre serás marcado como rosca-izquierda.

Si por principios desoyes estos consejos, y eres capaz de pagar el precio, de estar relativamente solo y soportarlo, de no alcanzar riquezas ni oportunidades y de navegar contra la corriente, de seguro vivirás en paz y satisfecho de vivir de acuerdo a esos principios, transmitiéndolos a tus hijos, pero no serás popular. Así es nuestro mundo y así siempre ha sido.

Tú tienes la libertad de elegir, como hace tiempo hice yo.


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